Hay días que pareciera que el universo se pone de acuerdo para recordarnos lo incómodos que estamos en un determinado momento, meter el cuchillo en la herida y añadir insulto a la agresión proverbialmente.
Llegas con mucha tranquilidad a sabiendas de un trabajo bien hecho, cabeza limpia y con mucha tranquilidad, pensando más bien en cosas dispersas sin prestar demasiada atención cuando a alguien se le ocurre volar la represa de la rabia reprimida de un gerente que seguramente tiene algún nubarrón en su cabeza. Y por supuesto proyecta toda esa frustración sobre la persona equivocada, que de vuelta responde (Por que no hay miedo en el corazón) y de nuevo proverbialmente All Hell’s Breaks Loose.
Jamás entenderé como alguien puede simplemente perder su calma, y empezar a lanzar sangre y fuego en todas direcciones sin importar las consecuencias y el efecto que eso puede tener en las personas que están alrededor, más allá de tener la razón, estar en lo correcto o simplemente ser el jefe o encargado, un poco de sentido común siempre cae bien, se gana más tratando bien a las personas que agrediendolas de forma incandescente como si de algo común se tratara.
Hemos descendido en varios niveles y varias formas a distintos niveles de inconvivencia de pasamos la mayor parte del tiempo sobreviviendo el desahogo secuencial de las personas. Es una situación que nos afecta a todos y sinceramente es bastante complicado por las diferentes cualidades que tiene nuestro país, nuestra ciudad. Es cuesta arriba y seguramente lo seguirá siendo.
El tema de hoy es una especie de canto rabioso, Velvet Revolver un proyecto con los integrantes que quedaron vivos de Guns N’ Roses y Scott Weiland de Stone Temple Pilots. Su primer disco Velvet Revolver es bastante bueno y puedo rescatar un par de canciones de la vaguada que representa la gran mayoría de canciones. De estas les comentó dos, una el día de hoy, y otra en algún momento cuando sea correcto: Headspace
Por favor, dejenme ser
No más preguntas
No más necesidades
Eres el cáncer
Eres la sanguijuela
Enviada para drenarme
De una enfermedad
Libera mi mente, levita
No le permitas a ninguno de esos entrar en mi cabeza
Dejenme tomar mi propio camino
quemen al resto que tratan de mantenerme encadenadoPlease, let me be
No more questions
No more needs
You’re the cancer
You’re the leech
Sent to bleed me
Of diseaseFree my mind, levitate
Don’t let any of those
Fuckers in my headspace
Let me go my own way
Burn the rest of them that
Try to keep me enchained
When I hear somebody sigh, ‘Life is hard,’ I am always tempted to ask, ‘Compared to what?’
Sydney J. Harris
You must be logged in to post a comment.